miércoles, 17 de febrero de 2016

Sin ti.

En el metro, destino Avenida América, con Trusty a mis oídos, una sonrisa en mis labios y muchas ganas de pensar, te escribo lo siguiente:

He pensado en las mil veces que te he tenido en mente, he pensado en lo mucho que dejé atrás por ti, he pensado en las miles de broncas que me he comido por poder verte, por poder saber que existías, que no eras solo un cuerpo detrás de un teléfono móvil y un par de mensajes dispersados en varios días y a varias horas.
Seguramente, no puedo decirte que nadie va a amarte tanto como yo, porque mentiría, pero créeme, nadie lo hará como yo lo hice.

Creo demasiado en todas esas cosas que me decías, lo mucho que palpé tu ausencia, en todas las veces que tu recuerdo mataba mi esencia lenta y profundamente.
He llorado sangre, y he arrancado con furia la piel de todas mis extremidades añorando tu aliento en mis oídos.
Nunca mereciste tener mi cien por cien en ésto.
Pero aún así lo tuviste.

¡Qué ingenua fui!

Refugiaba mis dolores en tu cuello mientras tú lo hacías en los senos de otra mujer con rostro difuso.
Mi almohada ha sentido todo mi dolor a tu partida, pero desde luego la que sí lo sintió fui yo.
Sentí cómo mi ánimo bajaba cada día, sentí morirme en vida, tomando toda clase de pastillas para intentar matar el dolor.
Mi psiquiatra dice que algún día te darás cuenta de lo que perdiste, pero que probablemente yo no quiera volver a tropezar con la piedra que previamente me reventó las piernas.

Así que hoy, que ha sido un día relajadísimo, he decidido hablar con gente nueva, relacionarme por redes sociales, me he desahogado, y por suerte he mantenido una de esas conversaciones que te hacen adivinar con el tiempo cuál es el secreto de esta vida terrenal que va pasando.
Y, ¿sabes?

Me ha dado igual, no he sentido la necesidad de tener a tu ser constantemente torturando mi cabeza, como una taladradora en el diamante.
Me siento viva, poco a poco mi cabeza empieza a mejorar, y me encanta esta sensación.
Conclusión, me encanta estar sin ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

07/04/2021

A siete de abril de 2021 soy consciete de que mi vacío realmente no va a llenarse. Que te fuiste, me rompiste y ya no tengo cómo arreglarme....