lunes, 20 de junio de 2016

M.

Llevo demasiado tiempo queriendo escribirte... Un año ha pasado y sigo pensando que en algún momento va a llegarme tu mensaje 'ya estoy en casa'.
Nunca llega.
Y lo echo de menos... Te echo de menos.
Tu piel tersa y firme bajo esos vestidos repegados y esa obsesión insana por las botas y los botines.
Sigo escuchando tu canción, es lo único que me queda de ti, éso, y mirar tus redes sociales.
Has cambiado, ya no tienes tu melena de leona, ya no tienes el pelo castaño... Aunque también vi que te cambiaste el pelo, como me dijiste, blanco y negro...
Pero es que eso me da igual...
Sólo quiero verte, una sola vez...
Para saber todo lo que una vez pude perderme y para saber todo lo que nunca voy a recuperar.
Aunque te miraré, y solo querré abrazarte...
Puede que quiera besarte...
Pero estarás fría, y eso me matará...

Así que nunca te hablo,
bailo contigo en la distancia, como decía Andrés en una de sus canciones.
Ésa que me encantaría cantarte,
ésa que me provoca lágrimas al primer estribillo...

Me gustaría dormir a tu lado, junto a esa colcha tan chula que te compraste para adornar tu cuarto en Toledo.
Te juro que nunca me hizo falta nada más que lo típico...
Leer en Bélgica, en cualquier porche... Porque aún recuerdo las broncas que teníamos si te decía de ir a Estados Unidos...

Desde que te fuiste me siento desnuda
y eso que han pasado muchas personas...
Pero ninguna tan equitativa como tú...
Tan buena...
Me dabas vida a la ya tengo...

Quería sentir tu aliento y demostrarte que aunque tuvieras un catarro de la leche,
mocos hasta el cuello y los ojos llorosos,
te seguiría diciendo que eres la más guapa del universo...
Porque lo eres.

En el fondo me hubiera gustado ir contigo a un bar de rock,
e ir a Madrid, recogerte de la universidad,
ir a tu casa
y amarte tantas veces como fuera necesario,
porque me encanta amarte...

Y hacerte la comida y cuando te pongas a estudiar... Yo marchar.
Y al día siguiente, no ir al bar de rock... No...
Te llevaría a lo más profundo de algún parque
y te empezaría hablar de lo mucho que me encanta el otoño,
de lo mucho que me gusta tu blusa amarilla
y esas nuevas botas negras que tanto te gustaban...
Ése día, en el retiro...
Era ése.
Y no fue.
Y lo siento.


(Hacía demasiado que no escribía, necesitaba esto.)

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07/04/2021

A siete de abril de 2021 soy consciete de que mi vacío realmente no va a llenarse. Que te fuiste, me rompiste y ya no tengo cómo arreglarme....